En las montañas de la Sierra Norte de Oaxaca, donde la caña de azúcar crece entre nieblas y barrancas, nace Oaxacaña: un ron elaborado a partir de jugo fresco de caña criolla cultivada en altura.

Inspirado en los métodos caribeños pero profundamente arraigado en la tierra oaxaqueña, Oaxacaña honra el legado de comunidades cañeras que llevan generaciones transformando el dulce de la caña en esencia. Aquí, cada gota es un acto de respeto: por el tiempo de la naturaleza, por la calidad sobre la cantidad y por el conocimiento compartido.